El I Encuentro Internacional de Mujeres Trabajadoras de las Artes y las Culturas, organizado por Gestoras en Red se realizó en Santiago de Chile del 4 al 7 de julio de 2017. Al Encuentro acudieron mujeres productoras, artistas y gestoras culturales de distintas regiones de Chile y de 9 países de América Latina: México, Honduras, Ecuador, Bolivia, Perú, Brasil, Colombia, Uruguay y Argentina.
Las sesiones del Encuentro tuvieron lugar en el Centro de Creación Infante 1415; el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM) y el Centro Cultural de Lo Padro, escenarios culturales idóneos para presentar proyectos e incentivar el diálogo en pleno invierno chileno. Algunos de los objetivos del Encuentro: Consolidar una red internacional de Mujeres Líderes trabajadoras de las culturas y las artes de América Latina. Desarrollar un plan de trabajo colaborativo a tres años plazo. Intercambiar conocimientos y saberes entre las participantes del Encuentro, a través de procesos como: ponencias, conferencias, talleres, mesas temáticas, ferias y muestras audiovisuales de las organizaciones participantes. Potenciar la participación y la asociatividad para la incidencia en las políticas culturales a nivel nacional e internacional. El Encuentro tuvo como resultado final, la realización de un manifiesto el cual fue presentado en la última jornada y que ya está siendo difundido en cada uno de los países allí representados.
Las temáticas abordadas en las mesas de trabajo fueron: 1. El Trabajo Cultural como Herramienta de Transformación Social. 2. Estrategias y Metodologías Colaborativas para la Sustentabilidad de Proyectos Culturales. 3. Derechos laborales y sociales para las mujeres trabajadoras de las culturas y las artes. 4. Arte, cultura y feminismos. Construcción de los feminismos en el arte político. 5. Activismo cultural. 6. Existencia y resistencia de mujeres gestoras y creadoras en Chile. 7. Industrias creativas, innovación y mujeres. 8. Planes nacionales de cultura, inclusión, género y equidad. 9. Empoderamiento económico y social de las mujeres trabajadoras de las culturas y las artes y matriacardo como solución a la crisis económica social. 10. Arte en la educación, movimientos culturales, género e inclusión.
Honduras presente en Chile
Honduras fue el único país de Centroamérica presente en el Encuentro. La participación fue de manera oficial representando a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, a través de la Dirección de Cultura, por Carmen Yadira Cruz Rivas, Subdirectora de esta unidad académica.
La participación de Carmen Cruz tuvo dos momentos. En un primer momento fue una intervención en la mesa de trabajo “El Trabajo Cultural como Herramienta de Transformación Social”, en donde se expuso su experiencia profesional como gestora cultural para diferentes instituciones del país, así como sobre la experiencia de otras gestoras y creadoras de Honduras. Y en un segundo momento, durante la Feria Expositiva Gestoras Encuentro 2017 en donde se habló específicamente de los proyectos que la Dirección de Cultura de la UNAH realiza actualmente.
Haciendo referencia a la participación en la mesa de trabajo 1, la intervención abordaba cómo el medio del arte y la cultura es uno de los sectores con mayor presencia femenina en este país pero no por ello, las mujeres gozan de las condiciones idóneas para desenvolverse. Sin embargo, se destacó su presencia y el trabajo que ellas realizan en calidad de sujetos activos y participativos en los procesos de la gestión cultural de Honduras. Se puso en perspectiva desde las voces de las profesionales del sector, así como desde la propia experiencia como profesional del sector y como mujer, con el fin de potenciar la construcción de nuevos discursos en el país, capaces de crear espacios de trabajo más justos para todas las gestoras y creadoras. En el Encuentro contamos con un documental de ocho minutos de duración y realizado por la Cinemateca Universitaria «Enrique Ponce Garay», cuya dirección está a cargo de René Pauck. Al equipo de la Cinemateca todo el agradecimiento por esta producción.
Previo al viaje a Chile y con el fin de obtener insumos para la presentación, Carmen Cruz acudió a crear un grupo focal en el cual participaron mujeres gestoras culturales y creadoras de Tegucigalpa. Las mujeres entrevistadas fueron: Samaí Torres/Periodista de la sección cultural de Diario El Heraldo. Isadora Paz/creadora (danza). Analyda Melara/Directora CHIMINIKE. Johana Montero/creadora (artista visual). América Mejía/Directora de MUA. Gabriela Carías/Coordinadora de Difusión Cultural de la Dirección de Cultura UNAH. Eva Carolina Gómez/MIN. Sandra Bastidas/Gestora Cultural de la GNA.
Algunas conclusiones
En el caso particular de Honduras, las mujeres ocupan cargos que permiten tomar decisiones pero desde un ámbito privado, no desde el Estado. Los múltiples obstáculos que encuentran en su camino hacia la participación y la evolución en iniciativas culturales no sólo son injustos para las mujeres sino que constituyen una violación a sus derechos culturales, disminuyendo fundamentalmente la diversidad cultural y privan a todos del libre acceso al potencial creativo femenino. La necesidad de garantizar la igualdad de género en el sector cultural no ha sido todavía suficientemente abordada. Aún nos queda por realizar esfuerzos desde todos los ámbitos por dialogar la problemática de género en la esfera cultural con el fin de eliminar prejuicios y barreras existentes. La misión de proteger y promover la diversidad de las expresiones culturales no puede tener éxito a menos que la igualdad de género sea reconocida como una cuestión esencial que debe integrarse en todos los esfuerzos por lograr este objetivo. La igualdad de género es piedra angular de los derechos humanos en general y los derechos culturales en particular. En tal sentido se recomienda que todo trabajo debe incidir por crear políticas y medidas que promuevan la igualdad de género y que reconozcan y apoyen a las mujeres como artistas y productoras de bienes y servicios culturales.
En el campo de la creatividad, las mujeres suelen ser “objeto” de representación de los hombres pero donde, por el contrario, su potencial creativo y expresivo se ha visto limitado directa o indirectamente por diferentes circunstancias en el presente. En tal sentido, encontramos un reto claro y definido: hay que equilibrar este relato social. El equilibrio lo conseguiremos cuando las mujeres pasemos a ser «sujeto» de creación, un cambio que requiere del trabajo de hombres y mujeres por igual. Entramos aquí en el ámbito de derechos humanos fundamentales: el derecho al acceso y la participación de las mujeres en la vida cultural y brindar oportunidades para ser escuchadas, valoradas y que sus creaciones sean difundidas en igualdad de condiciones. Ese es uno de los grandes retos fundamentales: incluir la diversidad de voces que existen en nuestras sociedades. Aún nos queda mucho por hacer.